La mañana del último día la dedicamos a visitar Níjar y un Garden Center dedicado a los cactus que se encuentra en esa localidad.
El núcleo urbano de Níjar no está dentro del área de protección del Parque Natural, cosa que puede hacer pensar en un escaso atractivo, en comparación con las poblaciones más asentadas en el litoral. Es un error pensarlo, puesto que vale la pena perderse por sus cuidadas calles, visitar su iglesia parroquial y subir hasta su atalaya.
El pueblo, o mejor dicho villa, está situado a los pies de la Sierra Alhamilla y se extiende hasta el Cabo de Gata. Su núcleo urbano ha conservado la estructura de origen árabe, laberíntica y estrecha, con las casas pintadas de blanco y la iglesia de estilo mudéjar.
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| Níjar |
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| Níjar |
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| Iglesia Santa Maria de la Anunciación - Níjar |
La
Iglesia Parroquial fue
construida en el siglo XVI, durante la repoblación cristiana que se produjo en la provincia después de expulsar a los moriscos. Se levantó en torno a una torre-fuerte que ya existía y que actualmente se utiliza de campanario.
Son de mucho valor el reloj, que es original y el artesonado mudéjar que fue restaurado recientemente.
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| Iglesia Santa Maria de la Anunciación - Níjar |
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| Níjar |
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| Níjar |
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| Níjar |
Desde que aparcamos el coche en el parking que hay en la entrada del pueblo, ya pudimos divisar una
atalaya a lo lejos, por encima de las casas del núcleo urbano. Nuestro cerebro ya empezó a atar cabos: atalaya-altura-vistas panorámicas- fotografías y allí nos fuimos.
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| Atalaya de Níjar |
El promontorio donde se asienta la atalaya sirvió como punto de vigilancia del vecino
castillo de Huebro. Mas tarde, cuando se fundó
Níjar, se convirtió en un recinto amurallado para defender el propio pueblo y ayudar también a la defensa de la ciudad de
Almeria. Su edificación la datan en torno al siglo XVI.
Cuando fueron expulsados los moriscos y
Níjar ya no estaba amenazada por sus ataques, la torre pasó a formar parte de la vigilancia de la costa, recogiendo los avisos de las torres costeras que alertaban de los peligros que se acercaban desde el mar.
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| Atalaya de Níjar |
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| Camino de acceso a la Atalaya de Níjar |
Parece ser que la torre se estaba degradando de forma importante, con grietas verticales que amenazaban con su derrumbe. En 2010 la
Junta de Andalucía decidió iniciar su rehabilitación y por estos días que la visitamos estaban terminando de arreglar los accesos al promontorio.
Un acceso fácil, un camino con escaleras y barandillas y rodeado de vegetación de la zona.
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| Atalaya de Níjar |
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| Atalaya de Níjar |
Es muy probable que esta no sea del todo la construcción original, probablemente ha tenido sucesivas reedificaciones y restauraciones por el deterioro producido por el abandono o por los efectos de los numerosos terremotos registrados desde su construcción.
Como todas las atalayas, es de planta circular, mas ancha en la base y con dos ventanas por las que se accedía. No tenia acceso desde el exterior, sino una escalera colocada en el interior y que se retiraba cuando los guardas estaban dentro como medida de seguridad.
Desde el mirador donde se asienta la torre se puede divisar toda la villa y la vista se extiende hasta el
Cabo de Gata y la costa. También, como no, el "
mar de plástico" o los invernaderos que colonizan toda la zona.
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| Cabo de Gata desde Atalaya de Níjar |
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| Iglesia Santa Maria de Níjar desde la Atalaya |
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| Níjar desde la Atalaya |
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| Níjar desde la Atalaya |
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| Cabo de Gata desde la Atalaya de Nijar |
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| Níjar desde la Atalaya |
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| Iglesia de Santa Maria y Atalaya - Níjar |
Terminada la visita, nos dirigimos a la entrada del pueblo donde se encuentra un paraíso para los amantes de los cactus,
Cactus Níjar.
Se trata de un vivero especializado en el cultivo de cactus y suculentas, un jardín de 15.000 metros cuadrados cuyo propietario, un austriaco que se instaló en la villa hace 15 años, está en continua evolución en cuanto a ideas para hacer mas atractiva la visita y aunar cultura con naturaleza. En el jardín se exponen esculturas que inmortalizan en piedra a estas plantas, se organizan conciertos de música, cursos, exhibiciones, etc.
Como vivero que es, también se pueden adquirir estos amigos espinosos a precios muy asequibles.
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
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| Cactus Níjar |
Con muy buen sabor de boca terminamos la primera parte de nuestro último día de viaje. Ahora tocaba reponer fuerzas en algún restaurante de la zona. Nos dirigimos de nuevo hacia la costa.
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